
En ocasiones y prácticamente de forma involuntaria, sobreprotegemos a nuestros hijos para que no sufran pensando que es lo mejor sin pensar en las posibles consecuencias que puede tener en los pequeños, como dependencia sensible o inseguridad ante cualquier inconveniente que se le presente en la vida. A veces, prevenir a toda costa que padezca o que pase por ciertas situaciones es un fallo que debe evitarse, pues para que un pequeño madure debe enfrentar diferentes situaciones por sí mismo. Por eso desde Sabioz.com queremos orientarte a de qué forma evitar sobreproteger a mi hijo.
Sobreprotección como educación es un fallo
La dicha no consiste en que otros luchen por nosotros, ni mucho menos. Los progenitores tenemos el deber de proteger al hijo siempre y en todo momento y cuando sea preciso para su integridad y para su buen desarrollo en cualquier campo, y esto es algo absolutamente natural que he de ser de esta forma siempre y en todo momento.
Pero no hay que confundir esa protección paternal con no dejar vivir experiencias al pequeño para que no se haga nunca daño de ningún género, ni físico ni sensible. La sobreprotección se vuelve un inconveniente cuando es un frecuente en la educación del hogar.
Potencia su autonomía para evitar sobreprotegerle
La autonomía de tu hijo es esencial y debes robustecerla aunque a veces te pueda resultar incómodo. Desde que son muy, muy pequeños, los pequeños pueden demostrar que son capaces de hacer más de lo que sus progenitores se pueden imaginar. Lo único que precisa tu hijo para probarte que es capaz es una ocasión y que puedas confiar en sus posibilidades.
Tu misión no es evitarle que no lo consiga por si las moscas fracasa, tu deber es asistirle enseñándole estrategias para que sea capaz de enfrentar cualquier complicad de su día a día. La toma de resoluciones es esencial, he de ser capaz de saber decir sí y de saber decir no cuando quiere decirlo. Debe ser capaz de decidir los pasos a proseguirse sabiendo las consecuencias que puede tener y de enfrentarlas.
La responsabilidad como clave
Para aumentar la autonomía precisará un tanto de libertad y sobre todo, responsabilidad. La responsabilidad que se le adjudica a un hijo siempre y en todo momento debe ir acorde a su nivel de madurez.
Esto es muy esencial para evitar inseguridades, fortaleciendo su autonomía y la seguridad en sí.
Las situaciones dónde las cosas salgan bien ayudarán a tu hijo a aumentar su autoestima, pero cuando las cosas salgan mal, no debes evitar su frustración, debe aprender a tener tolerancia a esta frustración aprendiendo de los fallos, en tanto que ellos nos dejan aprender, corregir y además procurarlo de nuevo.
Apoya a tu hijo
Que le demandes cosas a tu hijo o que tenga responsabilidades no impide que además reciba todo tu apoyo y cariño.
Luchar en la vida o sufrir por algo no significa siempre y en todo momento y cuando la persona que lo hace o lo sufre sea infeliz. Es sabido que tras combatir por algo y al final lograrlo, la satisfacción es casi inmejorable. Los pequeños deben pasar por eso, y debes permitírselo.
Para ello debes ser su guía, su bastón, un orientador, pero nunca quien haga las cosas por él para evitar que padezca. Recuerda que el amor incondicional de una madre o de un padre es el mejor apoyo y el mayor impulso para conseguir cualquier cosa.
Si quieres leer más artículos similares a Cómo evitar sobreproteger a mi hijo, te invitamos a que entres en nuestra categoría de Ser padre y madre.