Un baño caliente es una gran forma de relajarse y descansar, pero sería todavía mejor si añades una bomba de baño casera para convertir el simple baño en un tratamiento de spa.
Mide el bicarbonato de sodio y el ácido cítrico en un tazón. Tamiza si es necesario y mézclalos bien juntos.
Añade el aceite a la mezcla.
Si haces una bomba de baño de varios colores, ahora es momento de separar tus mezclas en un recipiente aparte antes de agregar color.
Agrega el colorante a las mezclas, el colorante es lo que le dará este toque única a las bombas de baño, en consecuencia te invitamos a que el color que eliges combine bien con la decoración de tu baño.
Rocía agua sobre la mezcla un tanto al tiempo y trabaja la mezcla para evitar la efervescencia. Ten cuidado de no pasarte con el agua. La mezcla debe quedar grumosa. Para describir la textura, podemos decir que sería como hacer un castillo con arena tenuemente húmeda.
Llena los moldes y comprime la pasta. Retira la bomba de baño del molde y déjalas secar durante dos horas en un lugar caluroso y seco.
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- Consejo para principiantes. Las bombas de baño pequeñas son más simples de hacer. Las grandes tienden a derrumbarse con mayor sencillez, al paso que que las más pequeñas son más robustas.