La zanahoria además de esto de ser un enorme comestible para dietas de adelgazamiento por las pocas calorías que aporta, es también un perfecto aliado para tener una piel sensiblemente más hermosa. Son muchas sus propiedades pero destaca sobre todo por sus efectos rejuvenecedores y regeneradores, dejando frenar el proceso de envejecimiento de la piel y aportándole más flexibilidad y elasticidad. Una de las mejores formas de añadir este comestible a tu rutina de belleza es mediante la preparación ciertas mascarillas, sigue leyendo este artículo de Sabioz y descubre de qué manera hacer mascarillas de zanahoria en poquísimos pasos.
Beneficios de la zanahoria para la piel
Principalmente, su elevada concentración en betacaroteno, antioxidantes y nutrientes como el ácido fólico, es lo que hace que la zanahoria sea un comestible increíble para el cuidado de la piel. Se ha incorporado a muchos tratamientos de belleza caseros por sus propiedades para hidratar, nutrir, reparar y mejorar el tono de la piel.
Los betacarotenos y antioxidantes que contiene la zanahoria son los que dejan remozar la piel, prevenir la aparición de arrugas y resguardarla antes los rayos UV en el momento en que nos exponemos al sol. Además, es una gran aliada para sostener el bronceado en la piel por más tiempo y lucir, de esta forma, un tono muy atrayente de forma prolongada.
Y no solo esto, la zanahoria también marcha bien en pieles con acne y grasosas, pues regular el exceso de sebo y favorece la eliminación de granos. Toma nota de las próximas mascarillas con zanahoria y comienza a aprovecharte de todos los beneficios cosméticos de esta hortaliza.
Mascarilla de zanahoria y aceite de oliva
¿Te complacería revitalizar la piel del rostro y darle un extra de iluminación? Entonces, debes probar la próxima mascarilla de zanahoria y aceite de oliva. Al efecto rejuvenecedor y regenerador de la zanahoria le sumamos las increíbles propiedades hidratantes y antiedad del aceite de oliva, un líquido dorado con muchos beneficios para la piel.
Para realizar esta mascarilla facial, solo vas a deber cocer dos zanahorias para después machacarlas y poder transformarlas en puré. Cuando se enfríe, añade una cucharada sopera de aceite de oliva y remueve la mezcla. Extiende la pasta logrado por todo el rostro, evitando el contorno de ojos y la zona de en torno a los labios, deja actuar por unos 30 o 30 minutos y, pasado ese tiempo, retira con agua fría o tibia. Esta preparación antiedad también puede servirte para mejorar el aspecto de la piel del cuello y el escote.
Mascarilla de zanahoria y miel
Si las primeras arrugas ya se pueden ver en tu rostro, nada mejor que comenzar a prevenir la aparición de nuevas y mitigar las existentes con este tratamiento casero de zanahoria y miel. La miel, de igual modo que la zanahoria, es también espléndida para aportar lisura y juventud a la piel. Además, sus enzimas naturales y su riqueza vitamínica dejan que la dermis esté bien humectada y protegida durante todo el día.
La receta de esta mascarilla casera es muy simple; primero, hierve dos zanahorias y una vez se hayan ablandando machácalas con un tenedor para conseguir una especie de puré. Añade 2 cucharadas de miel al puré y mezcla los dos ingredientes. Aplícala sobre la piel de la cara y deja descansar durante 15 o 20 minutos.
Mascarilla de zanahoria y iogur
Como hemos indicado, la zanahoria es buena para las pieles grasas y para aquellas mujeres que lidian con el exceso de sebo en su rostro cada día, una mascarilla de zanahoria y iogur puede ser su opción mejor. El iogur cuenta con propiedades antibacterianas, con lo que es ideal para tratar las pieles con tendencia acneica y finalizar con las impurezas.
Si quieres preparar esta mascarilla facial antigrasa, debes mezclar media zanahoria, un iogur natural y el jugo natural de medio limón. Remueve todos los ingredientes hasta conseguir una mezcla homogénea y ya podrás aplicarla sobre el rostro para que haga efecto durante unos 20 o 30 minutos. En el caso de que la mascarilla te quede demasiado líquido, la solución para espesarla puede ser incorporarle un tanto más de iogur.
Zanahoria para el bronceado
Gracias a su contenido en betacarotenos, la zanahoria es de los mejores comestibles para favorecer el bronceado ayudando a adquirirlo con más sencillez, como a mantenerlo bonito por más tiempo.
Un estupendo antídoto casero que puedes aprovechar para estimular la pigmentación de la piel es mezclar el jugo de zanahoria con unas gotas de aceite de coco y aplicarlo sobre la piel bien limpia. Si quieres descubrir más tratamientos como este, consulta nuestro artículo Cómo broncear la piel naturalmente.
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