¿Te agradan los risottos? Ahora puedes aprender a hacerlo tú en casa con una fácil receta en la que te contaremos, punto por punto, los trucos para preparar esta receta de una manera veloz y fácil. Tanto si tienes convidados en casa como si tienes ganas de asombrar a los tuyos, el risotto es un plato delicioso que seguro que les encantará a tu familia. En este artículo de Sabioz te contamos, punto por punto, de qué manera hacer un risotto simple y muy, muy rico, ¿te apuntas a probarlo?
45 minutos
Dificultad baja
El primer paso que vamos a hacer para preparar un risotto simple en casa consiste en picar los ajos y la cebolla en pedazos pequeños. A continuación, añadiremos cucharadas de mantequilla y aceite en una olla profunda pero simple de manejar. Deja derretir la mantequilla y calienta bien el aceite bien hasta el momento en que esté burbujeando.
Cuando esté de esta forma, vas a deber agregar las cebollas y el ajo y cocinar por 10 minutos a fuego muy bajo hasta el momento en que las cebollas se vean trasparentes. Después, coge el arroz y ponlo a rehogar con las cebollas. Sube el fuego y haz que el arroz torre un tanto.
Cuando esté sutilmente torrado y a fuego alto, busca el vino, que es como media taza de las normales de tomar café y ponlo en la olla. Deja que hierva y no te apartes del arroz. Mientras esté a fuego alto va a evaporar el licor y además absorberá veloz el líquido. En unos 3-4 minutos se verá como la imagen anexa, donde todavía hay líquido pero el arroz ha crecido un tanto.
Ahora es momento de agregar caldo. Bajamos el fuego al arroz primero. Al lado debemos tener una olla con caldo hecho por ti o empleando un cubito o pastilla de avecrem; si quieres emplea caldo casero. Lo que importa es que no esté demasiado concentrado y que esté hirviendo al lado, listo para ser usado, con un cucharón. Así que añade un cucharón de caldo hirviendo al arroz, baja el fuego.
No te apartes del arroz, remueve de cuando en cuando y deja que absorba el caldo. Repite esto hasta el momento en que se te concluya el caldo. Para saber si ya absorbió suficiente líquido prueba el arroz y de esta forma examinas la sazón, sal y pimienta. También cuando veas que al remover con una cuchara de madera en el fondo está prácticamente seco de líquido y está espeso, es el momento de apagar el fuego.
Una vez apagado el fuego añade el resto de la mantequilla y el queso parmesano. Mezcla bien, deja que funda y prueba. No toques más el risotto, tapa y deja descansar 4-5 minutos. Cuando pase el tiempo de reposo, la mantequilla y el queso y el hecho de tapar y bajar la temperatura lo pondrá más espeso. Sirve con más queso por encima y disfruta de un risotto simple y delicioso.
En Sabioz tenemos más recetas específicas de diferentes risottos que seguro que te agradarán. Descubre de qué manera hacer un risotto de espinacas, un risotto de setas o un risotto de verduras. ¡Están muy buenos!
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- No te apartes del risotto que se quema más veloz de lo que crees.
- La base de cualquier risotto es el arroz recomendable, vino blanco, el caldo, mantequilla y queso parmesano. No los reemplaces por otras cosas.
- Si quieres prepararlo de hongos, pollo, mariscos o cualquier otra cosa, añade esto cuando pongas el último cucharón de caldo.
- Los últimos pasos: taparlo, sacarlo del calor, poner la mantequilla y queso, sin inevitables. Eso dará el toque final.