La proactividad se ha transformado en una cualidad imprescindible para empresarios o personas que se dedican a la selección de aspirantes para ocupar nuevos puestos de trabajos. Y es que, sin duda, una persona con iniciativa propia, emprendedora, con muchas ideas y sin miedo a hacer frente a todo género de desafíos tendrá sensiblemente más éxito laboral y es lo que todos los jefes esperan localizar en sus trabajadores. Si tú también quieres resaltar en tu ambiente laboral y aumentar las posibilidades de ascender en la compañía para la que trabajas, toma nota de los consejos que te ofrecemos en el artículo de Sabioz sobre de qué forma ser proactivo en el trabajo.
¿Qué es la proactividad? Empecemos por acotar este término tan valorado en la actualidad en todos las compañías y puestos de trabajos. La proactivad hace referencia a aquella actitud en la una persona tiene un control absoluto de su conducta de una manera activo, o sea, contar con la capacidad de tomar la iniciativa, desarrollar y desempeñar acciones creativas y eficaces para dar como resultado mejoras. Y esto es exactamente lo que demandan la mayoría de empresas para su plantilla, trabajadores activos y con mucha iniciativa, descartando al contrario a aquellos sujetos con una actitud pasiva que se limitan a sentarse en la silla y hacer su trabajo las horas que dura su jornada de trabajo.
Ser proactivo no es una labor difícil o inalcanzable, solo debes comprometerte cada día con lo que haces y tener la voluntad de resaltar en el trabajo y también implicarte al máximo con tu actividad y ambiente laboral, algo que con el tiempo te reportará infinidad de beneficios en tu carrera, además de esto de una gran satisfacción personal. Se han realizado múltiples estudios en los que se ha analizado el comportamiento y cualidades de un trabajador proactivo; en ellos se ha señalado que para ser una persona proactiva sobre todo se debe:
- Buscar nuevas ocasiones de manera continua.
- Definir y marcar objetivos a corto y largo plazo alcanzables y orientados al cambio y a conseguir mejoras.
- Anticipar los inconvenientes y intentar prevenir dichos inconvenientes.
- Emprender acciones diferentes y actuar de forma diferente.
- Emprender nuevas acciones y actividades a pesar de los obstáculos que se puedan presentar.
- Ser perseverante, esmerarse al máximo y no rendirse ante malos resultados.
- Conseguir resultados tangibles.
Si quieres mudar tu actitud en el trabajo y comenzar a ser una persona proactiva para que tu superior valore todavía más tu labor, lo primero y esencial que debes hacer es desarrollar una capacidad de previsión. Mantente siempre y en toda circunstancia alarma y anticípate a los inconvenientes buscando soluciones de manera temprana por medio de la lógica y la creatividad. Si de manera continua examinas resultados, tienes consciencia de las acciones y prácticas rutinarias y sabes con certidumbre de qué forma marchan las cosas en la compañía, esto te será muy simple y te dejará asombrar a tus jefes con soluciones eficaces ante cualquier situación desfavorable que aparezca.
¡Nada de inseguridades! Este es otro punto básico para ser un trabajador más proactivo. Si debes encararte a un nuevo reto, confía en tus capacidades y muéstrate seguro ante él; solo debes tomar el control de la situación y no tener miedo a exponer tus ideas y pensamientos. De esta forma, tus superiores van a ver tu deseo de superación y valorarán que eres una persona en la que se pueden delegar funciones de mayor responsabilidad.
Otro de los aspectos a tener en cuenta para ser proactivo en el trabajo es la participación activa. Como hemos apuntado, no vale con llegar, hacer tu trabajo y marcharte a casa. Las personas con proactividad son observadoras, se implican en los inconvenientes que van aflorando en el cada día, comparten sus soluciones y también ideas con el resto de trabajadores y superiores y se convierten en parte activa de los resultados logrados.
Así mismo, las personas proactivas no dejan nada al azahar, y se preocupan por planear lo que va a ocurrir en un futuro. Es decir, tienen consciencia de que las acciones que se realicen en el presente son las que servirán para asegurar el éxito del mañana, con lo que es esencial que las resoluciones se tomen basándonos en un propósito final teniendo presente en todo momento en la situación en las que nos encontramos ahora y a la que se pretende o quiere llegar al terminar el trabajo.
Como ves, ser proactivo en el trabajo es algo imprescindible si se quiere avanzar en una carrera laboral y resaltar en un ambiente tan competitivo como el que hay en la actualidad en el planeta laboral. Para conseguir el éxito y sentirte satisfecho con tu trabajo diario, no vale actuar desde la pasividad sino debes convertirte en un agente activo, tomar la iniciativa y trasladar tus creencias, ideas y conocimientos a tus compañeros y superiores.
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