
Sensibilidad abdominal, puntos colorados en el tórax y el abdomen, heces con sangre, debilidad, agitación, escalofríos y sangrado nasal son determinados de los síntomas de la fiebre tifoidea. Esta infección producida por la bacteria Salmonella typhi, se transmite mediante comestibles y bebidas contaminadas. Esta bacteria viaja por el intestino hasta el torrente sanguíneo y desde allá se extiende hasta los ganglios linfáticos, la vesícula, el hígado, el bazo y otras partes del cuerpo. Se realizarán pruebas de sangre que confirmen que en tu organismo se encuentra esta bacteria. En Sabioz.com te explicamos de qué manera tratar la fiebre tifoidea.
El primer paso para tratar la fiebre tifoidea es proveer antibióticos para destruir la bacteria, estos deben ser administrados bajo supervisión médica, intenta ser estricto con las tomas y mantén el tratamiento el tiempo que el médico lo recete.

El consumo de líquidos es esencial por el hecho de que ayuda a prevenir la deshidratación causada por la fiebre y la diarrea. Puede ser administrado por vía oral y alternarse con electrolitos por vía intravenosa. Prepara una infusión de clavo de olor como antídoto natural para tratar la fiebre tifoidea, pon cuatro ocinco clavos de olor en agua hirviendo, déjalos al fuego hasta el momento en que el agua se reduzca un tanto, deja que se enfríe un tanto y bébelo día a día.

Debido al malestar causado por la fiebre tifoidea, es habitual que nuestra alimentación no sea la más recomendable, pero es necesario consumir comestibles sanos, en pequeñas porciones y frecuentemente para aligerar las alteraciones del tracto digestible, comestibles como la crema de arroz son recomendables, en tanto que aportan nutrientes esenciales y asisten a nuestro estomago. Otro de los antídotos caseros para tratar la fiebre tifoidea, es tomar un vaso de agua caliente con miel, no solo aporta energía sino ayuda a nuestro sistema digestible.

Pueden existir posibles dificultades como perforaciones y hemorragias intestinales, peritonitis o insuficiencia renal. Visite a su médico si presenta determinados de los síntomas anteriormente descritos para poder tratarlo a tiempo.
Tal como ocurre con ciertas infecciones, las medidas de precautorias siempre y en todo momento serán un punto esencial para evitar contagios. Colócate las vacunas pertinentes antes de salir de viajes a lugares donde pudiera haber brotes endémicos, toma agua filtrada y también ingiere comestibles que estén cocidos apropiadamente, evita comer pescados y mariscos crudos y productos lácteos que no estén pasterizados, lávate las manos antes de comer y lava las frutas antes de ingerirlas.

Por lo general los síntomas mejorarán desde la segunda semana de haber comenzado el tratamiento, si existe alguna recaída es por el hecho de que la infección no ha sido curada por completo, consulta a tu médico en tanto que puede haber algún cambio en el antibiótico. Es recomendable que aunque te sientas mejor, sigas el tratamiento durante los días indicados.
Este artículo es meramente informativo, en Sabioz no tenemos capacitad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún género de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier género de condición o malestar.
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