
El dolor de huesos es una molestia o especie de sensibilidad que puede experimentarse en uno o múltiples huesos, aunque los casos más habituales los encontramos en partes del cuerpo como las manos, los pies o las rodillas. Esta enfermedad puede ir acompañada de cansancio, rigidez articular o debilidad ósea y es precisa una opinión médica en tanto que puede ser un síntoma latente de enfermedades o afecciones más graves. En muchos casos, además de esto del tratamiento médico se puede recurrir a algunos antídotos naturales para calmar al paciente y progresar su bienestar. Sigue leyendo este artículo de Sabioz si te resulta interesante descubrir los mejores antídotos caseros para el dolor de huesos que se pueden emplear.
Los dolores óseos pueden ser consecuencia de lesiones o sobrecargas, de enfermedades como la osteoporosis, la artrosis o la artritis, y además incluso de otras afecciones de mayor gravedad. Es por esta razón que frente al sufrimiento de este género de dolor de forma muy frecuente o recurrente, se aconseja visitar al médico con urgencia, pues se debe diagnosticar la causa precisa de las enfermedades y además comenzar el tratamiento que se requiera en todos y cada caso. Los antídotos naturales que te mostramos ahora pueden ser un complemento al tratamiento médico o una ayuda en el caso de dolores temporales que no representen ningún género de gravedad, pero en ningún caso deben reemplazar a la medicación precripta por el facultativo.
Entre los mejores antídotos caseros para el dolor de huesos, se debe mentar la fitoterapia como una gran alternativa natural. Esta consiste en la utilización de ciertas plantas medicinales que son singularmente buenas para reducir los dolores y la inflamación, para progresar el estado y la movilidad de las articulaciones y frenar el desgaste de los huesos. Estas plantas pueden usarse como infusión o como cataplasmas aplicados de forma externa sobre la zona dolorida. En los siguientes pasos, te mostramos las opciones mejores.

Puedes aprovecharte de las espléndidas propiedades de la cola de caballo para intentar reducir los dolores óseos. Esta planta favorece la creación de tejido óseo y acelera la restauración de fracturas, grietas, siendo en consecuencia una excelente opción para quienes sufren de osteoporosis.
Prepara una infusión añadiendo una cucharadita de cola de caballo seca por cada taza de agua, deja que el agua hierva y entonces deja que repose unos minutos. Cuela el líquido resultante y endulza con un tanto de azúcar o miel si quieres que tenga un sabor más agradable. Puedes tomar una taza al día hasta querer las mejoras.

En casos de artrosis en los que se experimentan síntomas como dolores, rigidez y además inflamación en las articulaciones, puede ser realmente aliviador hacer empleo del romero. Es una planta con propiedades antioxidantes que resulta eficaz para reducir el desgaste de los cartílagos que se resienten en esta enfermedad reumática.
Para calmar los dolores de huesos, puedes consumir una taza de infusión de romero al día o hacer masajes en la zona perjudicada con aceite de romero. Caliéntalo anteriormente un tanto con las manos y realiza friegas suaves para que penetre bien en la piel y puedas querer el alivio. Si quieres preparar tú el aceite de romero en casa, sigue los pasos del artículo Cómo hacer aceite de romero casero.

En muchas ocasiones, los dolores óseos o articulares pueden deberse a una acumulación de líquidos en la articulación perjudicada. Y para favorecer la eliminación y expulsión de estos, nada mejor que la ortiga. Esto se debe a sus propiedades diuréticas, que la transforman en un ayuda ideal para reducir líquidos y evitar el desgaste de las articulaciones.
Puedes preparar una infusión de ortiga cociendo su raíz durante 10 minutos y, entonces, tomar una taza al día. También puedes poner sobre la zona con dolor un cataplasma o compresa empapada de la misma infusión y dejar descansar durante 20 minutos.

Beber una infusión de jengibre al día además es buen antídoto casero para reducir los dolores de huesos. Esta raíz tan valorada en la medicina tradicional china es idónea para reducir la inflamación de las articulaciones y calmar enfermedades provocadas por enfermedades reumáticas como la artrosis o la artritis. Añade una cucharada pequeña de raíz de jengibre en una taza de agua, espera a que hierva y toma la preparación una o un par de veces al día.

Además de las plantas medicinales indicadas anteriormente, hay otros antídotos naturales para el dolor de huesos y articulaciones que de igual forma pueden resultar efectivos y asistirte a sentirte mucho mejor. Entre ellos, encontramos los próximos:
- Jugo de patata: si lo aplica sobre la zona dolorida, se dismuyen las molestias gracias a sus propiedades calmantes y antiinflamatorias.
- Aceite de eucalipto: este es otro potente calmante natural; masajea la parte perjudicada con un tanto de aceite de eucalipto.
- Sales de Epsom: son calmantes y desinflamantes, con lo que tomar un baño de agua caliente con estas sales te dejará recobrarte de una manera sensiblemente más veloz.
- Col: aplicar las hojas de este comestible en forma de cataplasma sobre la articulación perjudicada es buen antídoto para reducir los dolores óseos o articulares.

Este artículo es meramente informativo, en Sabioz no tenemos capacitad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún género de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier género de condición o malestar.
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